En los últimos meses el impacto de la inflación en los negocios ha sido muy grande, con un incremento muy alto en los costos de producción y operación, y el riesgo de traducir estos incrementos al cliente final es elevado, ya que no queremos perder compradores. Es por eso que los negocios están buscando otras soluciones para poder mitigar el impacto de la inflación y una de esas es la implementación de inteligencia artificial (IA).
Sin embargo, este tipo de implementaciones están comúnmente ligadas
solo a la reducción de costos, cuando se tienen otras vías por las
cuales también nos puede apoyar la IA en estas épocas complicadas.
Cualquier implementación de IA debe tener un impacto positivo en la organización. Me gusta definirlo en tres vías:
- reducción de costos,
- aumento en ventas, y
- mitigación de riesgos.
El tema más delicado para platicar siempre será la “reducción de
costos” ya que la mayoría de las veces se liga a la sustitución de un
humano por la IA. En lo personal yo no creo en la “sustitución”, sino en
el “desplazamiento” de humanos por la IA. Cuando esta llega a hacer
labores de un humano, le da la oportunidad de ocupar su tiempo en otras
actividades que hoy la IA no puede hacer y trae un impacto de alto valor
a la organización.
Un ejemplo claro es que en Teamcore hacemos eficientes las tareas y empoderamos a diferentes divisiones de las organizaciones para que traigan un incremento en ventas. Esto es a lo que yo llamo “desplazamiento” de tareas por la IA.
Dentro de una organización podemos aplicar la IA en todas las áreas:
Operacional: ayudamos a los equipos en el punto de venta a entender sus oportunidades en la ejecución, transformando data
en tareas priorizadas por impacto económico para capitalizar todas las
oportunidades de sus productos en tiempo real. Esto les permite
eficientar sus tiempos y enfocarse en tareas extras que agreguen valor a
la organización.
Customer: así como el algoritmo de Netflix nos da recomendaciones (muy acertadas por cierto) de lo que nos puede interesar dentro de su repertorio de películas; en el retail se apoyan de los programas de lealtad y de las compras vía eCommerce, para recomendar productos al customer y realizar promociones
ad hoc que logran tener una tasa de cierre más alta de lo normal, ya
que saben de una manera inteligente “qué, donde y cuando” quiere o va a
querer, el consumidor comprar.
Administrativa: por ejemplo, se utiliza en los
equipos de Recursos Humanos, para el análisis de candidatos con una
probabilidad más alta de contratar a la persona ideal para la posición.
Si bien, en el pasado algunos de estos modelos para RRHH han estado en
el centro de atención por los sesgos que traían en contra de algunas
razas/etnias, recordemos que los modelos de machine y deep learning son
tan buenos o tan malos como la data que les damos de input para su
aprendizaje. La recomendación es asegurarnos de que los modelos que
usemos sean los correctos para nuestras necesidades.
Legal: la capacidad de apoyo de la IA para hacerlo más rápido y tener un mejor resultado a la hora de detectar áreas de riesgos en los contratos, NDA’s y demandas, entre otros, ya es una práctica normal de la IA en las empresas, la cual ayuda a mitigar muchos de los riesgos que normalmente cuestan dinero a las organizaciones.
Cada una de las iniciativas que abordé, si bien pueden tener como
inicio un objetivo diferente a “aumentar las ventas”, cuando son
ejecutadas de manera correcta y se capitaliza todo el valor que traen
consigo, casi todas terminan ayudando a “aumentar las ventas” y para
allá es adonde deberíamos de ir.
La reducción de costos tiene un límite y el aumento de ventas no.
Estoy seguro de que la mejor vía de crecimiento es vender más y la IA es
la herramienta perfecta para ayudarnos a hacerlo.
Entonces la respuesta a la pregunta ¿es la IA la solución para atacar la inflación? La respuesta es un sí. Es la solución para seguir creciendo y lograr los objetivos que nos proponemos año a año.